Morente tenía buenas formas flamencas, una ejecución del cante desde el conocimiento, hizo recitales memorables puramente flamencos, pero no sobresalió de la forma que le hubiese gustado; siempre quiso más.
Morente tenía buenas formas flamencas, una ejecución del cante desde el conocimiento, hizo recitales memorables puramente flamencos, pero no sobresalió de la forma que le hubiese gustado; siempre quiso más.